Alemania y el skate más xxx
Alemania tiene, desde los años ochenta, una estrecha y particular relación con el skate. El monopatín se convirtió en un símbolo de desobediencia en la antigua República Democrática Alemana, o Alemania del Este, unos años antes de la caída del Muro de Berlín, donde los niños y los adolescentes hacían frente al paisaje gris en el que vivían, literal y metafóricamente, adentrándose en lo que se convertiría en una subcultura.
Posteriormente este colectivo invadió toda la capital alemana, con su famosa Skatehalle, un espacio para los amantes del monopatín en el barrio berlinés de Friedrichshain. Y sin llegar a ser un actividad de masas -si lo fuera, perdería su esencia de algo «diferente» de lo «normal»- llegó a más gente y nuevas generaciones, apareció el german porno y continuaron teniendo teniendo entre ellas a representantes de la filosofía skater. Pero pase el tiempo que pase siempre tendrán algo de rebeldes, puesto que a esa gente «normal» y a las autoridades no les suele gustar que los skaters «estropeen» el mobiliario urbano con sus actividades.